
Muchos perdedores creen que tendrían éxito en el trading si tuviesen una cuenta más grande. La gente pierde sus cuentas o bien a causa de una racha de pérdidas o bien por una única operación muy mala. Cuando el perdedor se queda sin nada, incapaz de responder a la llamada de reponer el margen mínimo, el mercado se invierte y se mueve en la dirección que él esperaba. Comienza a cabrearse y piensa que sobreviviendo otra semana hubiera ganado una fortuna, en vez de perder.
Este tipo de personas ven las inflexiones del mercado que llegan demasiado tarde y piensan que estos cambios confirman sus métodos. Seguramente con otra cuenta, la misma historia se repetirá y el perdedor es barrido del mercado.
El perdedor puede destruir una gran cuenta casi tan rápido como una pequeña, el problema real de los perdedores no es el tamaño de las cuentas, sino operar más allá de sus posibilidades y una gestión del riesgo del capital poco rigurosa. Toman riesgos muy grandes para el tamaño de las cuentas, sea cual sea el tamaño. No importa los buenos que sean sus sistemas: una serie de operaciones malas seguro que los llevarán a la bancarrota.
La gente que empieza con el trading ni esperan perder, ni están preparados para gestionar operaciones con pérdidas. Considerándose a sí mismo infracapitalizados es una manera de evadir la realidad para evitar 2 verdades: su carencia de un plan de gestión del capital realista y su falta de disciplina.
El trader que quiera sobrevivir y prósperar tiene que controlar las pérdidas, y se consigue arriesgando sólo una pequeña fracción de su cuenta neta en toda operación individual. Aprende de errores baratos en una cuenta pequeña.